
Economía y cerveza artesanal
El sector de la industria de la cerveza artesanal nació como un movimiento emergente que ha aportado a la economía, gracias al esfuerzo de los cerveceros que han buscado darle a la micro industria, una identidad propia.
Quien se enfrasca en esta aventura, sabe que no se debe dejar nada a la improvisación, ya que consideran que el mercado de la cerveza artesanal es atractivo, rentable y generador de empleos, y que así se han logrado posicionar en un movimiento que cada día se afianza y crece, a pesar del trago amargo que estamos viviendo actualmente.

Por otro lado, están los consumidores de cerveza artesanal, que sin distinción de edad, lo mismo son millennials que personas maduras, crece a pasos agigantados dispuestos a probar la cantidad de matices, densidades, sabores y aromas que cada cervecero imprime en sus recetas, que permiten múltiples combinaciones e interpretaciones para que los consumidores disfruten de un buen maridaje, lo que conecta a la industria cervecera artesanal, con la industria restaurantera.

La aceptación en el gusto del consumidor que ha conquistado la cerveza artesanal ha beneficiado al país en cuanto a generación de empleos, principalmente en la población joven, el 60 por ciento de quienes laboran en este nicho, son menores de 30 años, según informes de la Asociación de Cerveceros Artesanales. Los datos de la creación de puestos laborales en este sector, arrojan que existen, hasta a finales del año pasado, 940 cervecerías artesanales y que generan más de 6373 empleos, en promedio de 6.78 empleados por cervecería, esto sin contar que su producción ha crecido un 70.5% del 2017 al 2018, según datos de ACERMEX.

Al inicio, la mayoría de las productoras de cerveza artesanal se establecieron en el valle central, pero al paso del tiempo se fue desarrollando esta industria en otras zonas del país, principalmente en las zonas costeras, donde la generación de empleos es vital, porque el boom de la cerveza artesanal hace mancuerna con empleo joven.

Según ACERMEX, uno de problemas a los que se enfrentó la industria artesanal de la cerveza es que sus productos son más caros, comparados con las cervezas industriales, sin embargo, la explicación es muy sencilla, son más costosos porque todos los insumos se compran a baja escala, sus producciones son más pequeñas y su elaboración, es más cuidada, además, de que en México no hay suficiente materia prima para la producción de la cerveza artesanal por lo que se importa, lo que te garantiza que se está tomando 100 por ciento malta, con una producción bastante cuidada y con extrema calidad en sus productos, sin químicos ni conservadores y granos bien seleccionados.

El consumo de la cerveza artesanal es una tendencia mundial y México no es la excepción, se ha desarrollado en otras vertientes a nivel nacional, como el turismo gastronómico, como en Baja California, Mérida o Jalisco que cuentan con “rutas de cerveza” por lo que la cerveza artesanal va de la mano con el turismo. La tendencia de crecimiento del mercado de la cerveza artesanal, muestra una tendencia de crecimiento a doble dígito por año.

En cuanto a la preferencia del estilo de cerveza artesanal, en México son: Stout, Porter, IPA, Plisner y Sour, y la forma correcta de tomarlas sería hacerlo en vaso para poder tener una apreciación tanto del sabor como del aroma y también de la vista. Es importante saber la temperatura correcta para consumirla, algunas etiquetas recomiendan el grado de temperatura y en que vaso hay que consumirlas, los cerveceros están trabajando en que cada etiqueta te aporte un nuevo conocimiento del producto.
